INTEGRACIÓN

INTEGRACION-45DESTACADO

LA DELICADA TAREA DE SER MADRE Y PROFESIONAL


El rol que desarrollan las mujeres en el entorno laboral al saber equilibrar su función como madre y como profesional es digno de admirar.

Por Tomás Mayorga


Hace dos años comencé mi Maestría en Administración de Negocios en Sam Houston State University. Desde ese entonces suelo reflexionar sobre lo desafiante que es superarse y desarrollarse como profesional. Es un largo proceso que lleva tiempo, trabajo y mucho compromiso. Diariamente intento observar realidades ajenas. Con el tiempo desarrollé una profunda admiración por aquellas mujeres que logran formarse profesionalmente y ser madres a la vez. Sin desmerecer el rol de un padre, la mujer es quien comúnmente se ve más afectada en lo laboral y debe redoblar su esfuerzo por continuar su carrera.

La mujer es quien comúnmente se ve más afectada en lo laboral y debe redoblar su esfuerzo por continuar su carrera

 

Carolina Denkler es madre de Florencia, de 6 años, y directora de proyectos en Third Term Learning, una empresa especializada en gestión del conocimiento y capacitación a distancia (e-learning) con sede en Argentina y Estados Unidos. Graduada de Texas A&M y habiendo estudiado en la Universitat Politecnica de Catalunya en Barcelona, Carolina planeaba su carrera profesional desde una temprana edad.   

Como muchas mujeres jóvenes en Houston, Carolina decidió no abandonar su carrera profesional una vez embarazada. Ser madre a los 22 años y continuar trabajando es una de las aventuras más retadoras que alguna vez tuvo que enfrentar. En su segundo año de maternidad, Carolina trabajaba 10 horas diarias y con la ayuda de Matthew, su marido, se intercalaban las distintas responsabilidades de la pequeña Flor.

Hoy Carolina cuenta con más experiencia laboral y, con su carrera encaminada, tiene más tiempo para dedicarle a su familia. Sabe que hay ciertas actitudes que facilitan el mix de roles entre madre y profesional. Con el correr de los años, aprendió a no tomar decisiones basadas en los estándares de otras personas. “El hecho de que puedas hacer cualquier cosa no significa que debas hacerlo todo” admite. También remarca la importancia de no asumir que el resto de la gente entenderá la situación de una madre: “Esto aplica a todos; a la pareja, a los compañeros de trabajo y a los mismos hijos. La comunicación es muy importante. Trabajar para un supervisor al que le puedas hablar sinceramente y que sepas que te ayudará a balancear tu vida laboral y personal es clave” agrega Carolina. Por último, deja en claro que rodearse de otras parejas amigas con una situación similar es muy útil y saludable: “son ellos los que pueden brindar soporte, consejo, ayuda y una clara perspectiva cuando más lo necesitas.”

Ser madre en un entorno laboral implica trabajar con mucha otra gente que no tiene esa responsabilidad y que, por ende, tiene más tiempo y energía. Cumplir con el rol de madre sin dejar de lado el aspecto profesional ni desanimarse es simplemente heroico y digno de un fuerte aplauso.


Tomás Mayorga es estudiante de maestría en administración de empresas (MBA) en Sam Houston State University y voluntario en CHI St. Luke’s Hospital – The Woodlands. Puedes contactarlo al correo tfm003@shsu.edu